Quien no ha pensado
cuando pequeño:
¿dónde está el
hombre que canta
dentro del televisor?
o ¿quién cobra de
la tarjeta de los
mayores cuando la
pasan por un cajero?
Esta imagen
publicitaria habla por
sí sola, y supongo
que no pocas
personas se hayan
tomado un café
sintiéndose en buena
compañía con la chica
que hace el café.
Está muy buena, a mi me ha dado mucha gracia. Ojalá y pudiéramos conservar mucho más de la imaginación que teníamos cuando éramos pequeños, para hacer este tipo de diseño publicitario. Además la idea que se vende es que el café es tan bueno como si lo acabara de hacer la chica.
ResponderEliminar¡Tienes razón Tata! Es de una imaginación desbordante.
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